sábado, noviembre 10


Quise retener aquel manto de ternura

pero las flores se marcharon sin regresar,

mustias quedaron las hojas

esperado su retorno,

llantos de lluvia cayeron lentamente

hasta inundar aquellos

surcos que van dejando los años,

olas de viento acongojadas

se repliegan misteriosamente,

en los brazos de aquellos

recuerdos que no se olvidarán.